Meditación

El Halo Divino

Una herramienta de transformación

Valor UD$25

Meditación

El Halo Divino

Una herramienta de transformación

Valor US$25

¿Qué es el Halo Divino?

  • Está hecho de geometría sagrada, el lenguaje divino de la creación. Formas de pensamiento de la mente de Dios.
  • Es un puente hacia un contenedor, donde esta la red.
  • Es una esfera, recipiente para materializar el mundo físico
  • El núcleo · plano divino que conecta con el todo
  • La esfera dorada de la consciencia · patron geométrico de la red
  • Océano de fuego, consciencia pura · Kabbalah
  • Microcosmos del macrocosmos

Aprende

Cómo activarlo

Comprensión de tu sistema energético a través de la geometría sagrada

Equilibrar tu sistema energético

Entender como alinear tu cuerpo de luz con tu mundo físisco

Magnetizar para manifestar

Recibir frecuencia de alta vibración que te permitan materializar una mas vida plena y próspera

¿Como trabajar con él halo como patrón de energía desde los planos superiores de consciencia hacia la manifestación física?

¿Como trabajar con él halo como patrón de energía desde los planos superiores de consciencia hacia la manifestación física?

Testimonios

La experiencia de sentir las vibraciones dentro y fuera del cuerpo fueron monumentales, así como la sensación y la seguridad de estar en medio del universo y la madre tierra conectada a ambos, muy emocionante . Fue una experiencia grandiosa que repito día a día gracias a este taller.
Esperanza Piedrahita
La meditación del Halo divino es una poderosa herramienta para entender nuestra tecnología como seres humanos. Me ha permitido comprender la energía mía que sólo yo poseo, cómo activarla y cómo profundizar en ella para así armonizar mi aura y sentirme en equilibrio en mi auténtica esencia.
Helena Saenz
Es una herramienta única y llena de energía. Empecé a recibir respuestas a través de hechos concretos, como si me hubiera llenado de frecuencias muy altas que hubieran atraído lo que necesitaba. Es un portal de conexión divino, efectivo y poderoso. Ahora es parte de mis meditaciones diarias.
Ana María Vallejo